Bienvenido querido usuario a fantasticlubvip.com. Esperamos que tu estadía aquí sea placentera y que compartas muchas cosas con nosotros.
ewe | Anto | Bee | Kohu |
Últimos temas
El diseño del foro, así también del Skin y la información y contenido de éste son obras del staff administrativo de @fantasticlubvip. Noticias, actualizaciones y fotos se les da su merecido crédito a los k-fansites de Big Bang, así también a Twitter, google, Facebook, youtube, etcétera. Códigos HTML & Css @Foroactivo y @oursourcecode.net.
¿Alguna queja? Contáctenos.
{Hetero} Fall in love
4 participantes
Página 1 de 1.
{Hetero} Fall in love
Fall in love
- Spoiler:
- Hace un día soleado aunque estaban a mediados de noviembre, se siente como los rayos cálidos del sol entran por la ventana, dando luz a la vacía casa, se ve más amplía al no tener ningún adorno en ella. Un simple sofá y un mueble para el televisor frente a él, ni fotos, cuadros, Cds, nada. Es como si nadie hubiese habitado antes ese lugar. En una habitación, una chica de baja estatura y los cabellos dorados, casi como los rayos de ese sol que intenta darle algo de vida a la tristeza que inunda la casa, esta sentada encima de la cama, mirando todo a su alrededor, al igual que la sala, su habitación también esta ahora vacía. Un suspiro sale de sus labios, acompañado por unas lágrimas que luchaban por salir. Junto a ella descansa una caja repleta de fotos, recuerdos que no consigue olvidar. Regalos que no puede tirar, cartas que no puede quemar, aun que le gustaría poder hacerlo, pero algo dentro de ella no se lo permite. Se niega a olvidar. Le gustaría tanto tener ese valor que tanto había fingido tener tiempo atrás y poder acabar con todo, borrar esos meses de su memoria y empezar otra vez desde cero. Se suponía que iba a ser fácil. y ahora...ahora no se sentía feliz. Le echaba de menos. Iba a echar de menos todo aquello, esas cosas que la hacían sacar de quicio, las continuas peleas que siempre acababan en risas, las competiciones sin sentido, su peculiar sentido del humor...Le echaría tanto de menos.
-Aiko, deberíamos irnos ya. El auto esta abajo esperando.- Le decía su manager desde el marco de la puerta, una señora de unos 36 años de edad, amable y disciplinada a la vez, con un estilo muy formal a la hora de vestir. Aiko simplemente asintió limpiando el rastro de lágrimas de su rostro. Nunca le había gustado que nadie la viese llorar. - Si necesitas unos minutos más...
-Estoy bien.- Imitó una sonrisa mientras levantaba su rostro.- ¿Las demás ya están abajo?.- Preguntó ahora mientras recogía la caja y salía de la habitación.
-Si, ellas también te están esperando.- Dijo la señora siguiendo a la chica, la cual dio un último vistazo a la casa antes de salir definitivamente de ella. - Ahora empiezas un nuevo camino. Debes ser fuerte y dar lo mejor de ti. Todo ira bien.- Su manager intentaba darle ánimos, posando una de sus manos sobre los hombros de la chica. Ella asintió imitando una sonrisa. Realmente hoy le estaba costando mucho sonreír.
Una última vista atrás, mirando el gran edificio, siempre había sido firme a el echo de no mirar nunca hacía atrás, pero esta vez no puedo evitar hacerlo, le costaba marcharse de allí. Aun tenía la esperanza de que el aparecería para al menos despedirla. Espero unos segundos, pero el no estaba. Resignada volvió su vista al frente y entro al auto, sentándose en el asiento del copiloto. Las demás chicas la miraban sin poder decir palabra alguna. De echo no había palabra que ellas dijeran que la pudiesen animar en ese momento.
El motor se puso en marcha, Aiko tomo sus cascos y los puso al máximo volumen, no quería oír nada que no fuese música. Era lo único que podía tranquilizarla, su vía de escape. Fijo su vista en la caja que aun sostenía. Respirando hondo la abrió. Se le venían tantas cosas a la cabeza, tantos recuerdos. Tenía miedo de mirar dentro de la caja, pues no sabía si sería capaz de controlar su llanto. Dudosa tomó una de las fotos. Afortunadamente sonrió. Una sonrisa que desprendía nostalgia y tristeza. Sus ojos se humedecieron, pero tras frotarlos se recompuso y volvió a mirar la foto. Fue una de las primeras que se había tomado al llegar a Seul. Cuando aun no sabía todo lo que viviría en esos meses.
Capítulo 1.
-Una vez más!.- Gritaba la chica de cabellos dorados.
-Unnie estamos cansadas, dejemoslo por un rato.- Se quejo la chica tumbándose en el suelo de la sala de ensayo.
-Suni si solo lo hemos echo 3 veces.- Volvió a decir Aiko parando la música.- Y no me digas unnie me hace parecer vieja y solo soy un año mayor que tu.- Dijo con una sonrisa mientras intentaba levantar a la maknae del suelo.
-Esta bien unnie.- Sonrió Suni, mientras Aiko bufo y la soltó, haciendo que la pequeña cayera al suelo de nuevo.
-Auu, ¿Por qué me dejaste caer!?.- Refunfuñó Suni.
-A veces dudo de que seas la líder.- Bromeó la mayor de las tres, Young Mi, Aiko bufó volteando sus ojos mientras puso de nuevo la música.
-Esta bien, como líder que soy, hagamoslo una vez más.- Sonrió triunfante, mientras Suni y Young Mi suspiraron resignadas, posicionándose en sus respectivos sitios para practicar de nuevo la coreografía.
Tras una hora, Suni y Young Mi estaban exhaustas tiradas en el piso, casi sin aliento. Pero Aiko aun seguía ensayando por su cuenta, mientras las demás la miraban cansadas.
-¿Cómo puedes seguir bailando como si nada?.- Susurró la más joven mientras secaba el sudor que corría por su frente.
-Yo realmente soy mala en el baile, debo esforzarme más.- Le contesto Aiko sin dejar de bailar.
-Has mejorado mucho, deberías descansar un poco.- La mayor se levantó y apagó el equipo de música, recibiendo una mirada asesina por parte de Aiko.- Es por tu bien, y por el de nosotras, si oigo una vez más esa canción acabaré odiándola.- Sonrió YoungMi.
Las chicas se estaban entrenando muy duramente. Pero sobre todo la que más enserio se lo tomaba era Aiko, ella ni siquiera era coreana, sus padres decidieron mudarse a Busan cuando ella era pequeña. Desde siempre Aiko había soñado con poder formar un grupo y hacer buena música. Le encantaba escribir sus propias canciones y luego ponerle música. Sus padres nunca estuvieron de acuerdo con que su única hija fuese cantante, por lo que Aiko nunca les había contado que había formado un grupo con dos chicas más de la costosa academia donde ellos a muy duras penas le pagaban para que pudiese aprender a tocar el piano. Ella sabía que estaba mal, el echo de engañarles a pesar de el gran esfuerzo que estaban poniendo para que ella pudiese ser una gran pianista. Y en un principio ella se conformó con solo tocar el piano, pero tras unos días de ingresar a la academia y ver que en esta también podían formarse sobre canto y danza, volvió a ella ese sentimiento de querer ser una gran cantante, una cantante que hacía sus propias canciones. Fue en ese momento donde conoció a Suni, una chica infantil y divertida que poseía una gran voz. Más tarde se les unió YoungMi, una bailarina que dominaba todos los estilos, con carácter y una brillante personalidad. Fue en ese entonces cuando se les ocurrió la idea de formar un grupo, solo por diversión, ni siquiera tenían un nombre. Ensayaban las canciones que Aiko componía, YoungMi les ponía coreografía, mientras Suni le daba ese punto adorable con su angelical voz. Durante dos meses todo fue normal, ensayaban siempre que les dejaban una de las salas libres en la academia y luego cuando lograban hacerlo bien lo grababan en vídeo.
Una vez Suni fue más emocionada de lo normal a la academia, llegó brincando y gritando a todo pulmón buscando a sus amigas.
-Nos cogieron, nos cogieron!!.- Gritaba mientras abrazaba a todo el que se le pusiese en el camino. Llegó a la sala de ensayo y tras abrazar a Aiko y YoungMi les enseño el papel que sostenía en su mano, casi sin poder hablar a causa de la emoción, les pidió que lo leyeran.
''Vi su vídeo y realmente pienso que tienen talento, me gustaría haceros una prueba para que os unierais a nuestra compañía, reunanse conmigo dentro de una semana, traigan algo preparado. Saludos. YGE. ''
Las chicas no pudieron evitar saltar de la alegría. Una prueba para entrar a formar parte de la YG era todo un sueño.
-P-pero...¿como consiguieron el vídeo?.- Preguntó Aiko dejando de brincar.
-Bueno...Unnie tu siempre andas diciendo que te encantaría poder vivir de la música, y realmente pienso que podríamos hacerlo. Por eso mandé el vídeo a la YG.- Confesó la menor.
-Ah esto no puede ser cierto.- Suspiró feliz la mayor de las tres.
-Pero mis padres...Ellos no lo aceptaran.- Dijo Aiko bajando de golpe de esa nube.
-Encontraremos una forma.- Intervino YoungMi.- Esta es una gran oportunidad para todas.
-Pero...- Intentó de nuevo excusarse.
-Pero nada. Además, ¿Cómo podremos hacer esto sin nuestra líder?.- Anunció feliz Suni, recibiendo un asentimiento por parte de YoungMi.
-¿Líder?.- Dijo asombrada Aiko. Las demás asintieron sonriendo mientras de nuevo se fundían en un gran abrazo.
Quedaba solo dos días para la esperada entrevista. Por suerte había una pequeña empresa de la YG en busan, donde se hacían entrevistas a las personas que aspiraban a entrar a formar parte de la gran familia, sin necesidad de viajar a Seul para hacer la prueba de acceso.
Aiko seguía preocupada, si les decía a sus padres estos se opondrían rotundamente, y al ser aún menor de edad no habría nada que ella pudiese hacer. Realmente se sentía muy frustrada.
-Vamos a comer! Muero de hambre!.- Intervino la maknae terminando de recoger sus cosas de la sala de ensayo.
-Si! Mi madre me llamó hace un rato, nos espera una rica comida en el restaurante.- Prosiguió YoungMi bastante emocionada. Adoraba la comida, sobre todo la que le preparaba su madre.
-Unnie~!.- Llamo Suni a Aiko, la cual seguía inmersa en sus pensamientos.- Unnie!!~.- La zarandeó al ver que esta no la oía.
-Oh, perdona, ¿Qué ocurre?.- Preguntó mientras recogía sus cosas al igual que las demás.
-Vamos a comer!!.- Gritó YoungMi saliendo de la sala. Suni miró detenidamente a Aiko, pudo notar su preocupación, y aunque sabía que la líder era demasiado cabezota como para reconocer que estaba preocupada, de su boca salieron por si solas unas palabras de animo.
-Pensaremos en algo. No te preocupes.- Sonrió la maknae mientras seguía a YoungMi, la cual seguía cegada por las ganas de comer. Aiko sonrió más aliviada al oír esas palabras. Aunque en su interior casi no tenía esperanzas, el ver a sus amigas felices y sentir que su sueño podría hacerse realidad le hacía recobrar fuerzas y valor.
-Ya lo tengo!.- Gritó de repente la más joven mientras las demás la miraban expectantes aun masticando la deliciosa comida que la madre de YoungMi había preparado para ellas.
-¿Qué se te ha ocurrido?.- Preguntó Aiko dejando encima de la mesa los palillos.
-A ver.- Sonrió la maknae.- Dentro de seis meses es tu cumpleaños.- Afirmó la joven, Aiko asintió sin entender nada.- Solo tenemos que falsificar la firma de tus padres...-Suni no pudo terminar de hablar cuando YoungMi explotó en una carcajada, recibiendo una mirada bastante enojada de Suni.- Es una buena idea, dejadme que termine.- Refunfuño la chica.
-Pero Suni ¿Como vamos a hacer eso...?, aunque funcionase,si vamos a Seul, ¿No crees que notarán mi ausencia?.
-Si me dejarais acabar...-Le lanzo una mirada a YoungMi, la cual se había repuesto del ataque de risa y seguía comiendo.
-Sigue, sigue.- Le decía ahora con la boca llena.
-Bien, podemos decirle que te han dado una beca para estudiar en el mejor conservatorio de Seul, solo será por seis meses, hasta que cumplas los 20 años, en ese entonces ya no podrán impedírtelo.
-Pero...¿Y la empresa que?.-Volvió a cuestionar Aiko.
-La empresa no tiene porque enterarse, lo tengo todo pensado. Primero haremos unos papeles falsos para la beca en Seul, cuando tus padres lo firmen solo tenemos que copiar la firma en los verdaderos papeles para entrar en la YG. ¿No es perfecto?.- Sonrió triunfante Suni.
-Para un momento. ¿De dónde se supone que vamos a sacar esos papeles?.- Intervino ahora YoungMi.
-Eso déjenlo en mis manos. Tengo un amigo que puede ayudarnos.- Contesto la chica aun más emocionada.
-No se que decir, no quiero mentirles.
-Vamos Aiko, sabes que no te dejaran ir y este es tu sueño, luego puedes explicarles todo.-Dijo de nuevo Suni agarrando las manos de su Líder.
-Ahh.-Suspiró Aiko.-Esta bien. Solo espero que esto funcione.-Sonrió al fin, siendo abrazada velozmente por una Suni repleta de felicidad.
El día esperado había llegado. Las chicas se presentaron en el edificio donde se las había citado. Estaban realmente nerviosas. Suni no paraba de dar pequeños saltitos, cosa que ponía aun más nerviosa a YoungMi, la cual la tomaba por los hombros para que esta parase, pero solo conseguía que volviera a hacerlo con más intensidad.
-Ya debería de haber venido, nos citó a las 10 y son casi las 12.- Se quejó YoungMi mientras se tiraba agobiada en el gran sillón de la sala.
-Estarán muy ocupados.- Decía una sonriente y emocionada Aiko.
-Ellos deberían ser puntuales.-Volvió a quejarse YoungMi. Aiko sonrió mientras se dirigía a la ventana, mirando a través de ella. En su cabeza venían pensamientos contradictorios, por una parte se sentía tan feliz de poder cumplir su sueño, pero por otro la imagen decepcionada de sus padres la hacían sentir realmente una persona despreciable.
-Mira!.- Exclamó Suni mostrando unos papeles.- Parecen reales ¿eh?.- Sonreía orgullosa.
-Oh, si que parecen reales.- Dijo YoungMi agarrándolos.- ¿Con que tipo de personas te relacionas tu?.-Preguntó con una sonrisa la mayor.
-Solo es un amigo que me debía un favor.- Contestó la maknae.
-Guarden eso!.- Se apresuró Aiko.-¿A caso quieren que nos descubran?.
-Vamos unnie, nadie sabe nada de nuestro majestuoso plan.- Contestó la makane guardando los papeles de nuevo en su mochila.
Las chicas estaban cansadas de esperar, eran casi las 12 y media de la mañana y el estómago de YoungMi aclamaba comida. Suni por otro lado no paraba de andar de un lado a otro de la sala, haciendo que YoungMi se frustrara al verla.
-Iré a por algo de comer.- Dijo Aiko levantándose de su asiento, necesitaba salir de esas cuatro paredes.
-Vuelve pronto~!.-Le gritó YoungMi desesperada, tirando le un cojín a la maknae.
Aiko sonrió y salió de la sala. Cuando llegaron vio una máquina de estas en las que puedes comprar chocolatinas, bebidas y demás cosas tecleando una clave, así que decidió ir a la planta baja del edificio para comprar allí. Mientras bajaba iba tarareando la canción que debían mostrarles hoy a la persona que las entrevistaría. Al llegar a la planta baja miro alrededor pero no lograba ver la máquina que buscaba. ¿Se había equivocado entonces?.
Tras inspeccionar el lugar sin éxito alguno, se decidió en ir a preguntar a la secretaría.
Ante ella había un chico con una capucha que hablaba con aquella secretaría, por lo que esperó su turno, pero tenía bastante curiosidad, estaban en mayo, por lo que la temperatura era cálida, ¿Por que ese chico llevaba una capucha con el calor que hacia?. Realmente la curiosidad de Aiko aumento cuando el chico se volvió hacia ella, también llevaba lentes de sol, ¿Lentes dentro de un edificio!?, es muy raro, pensó la líder.
El chico parecía despistado y algo nervioso, llevaba una carpeta en sus manos. Al volverse rápidamente no pudo evitar chocar con una pensativa Aiko, que aun seguía divagando sobre lo extraño que era ese chico.
-Oh, lo siento.- Se disculpó la joven, aunque realmente la culpa no había sido suya. El chico apenas se inclinó un poco y se dirigió a las escaleras, dejando a una molesta Aiko mirándole mientras se alejaba.
Una vez encontró la máquina y pudo hacerse con la comida subió de nuevo a reunirse con las chicas. En su mente seguía presente ese chico que había visto antes. Lucía cansado, pero aun así no debió ser tan descortés con ella. Un simple lo siento habría bastado.
-Si me lo vuelvo a cruzar...Ah, espero por tu bien que no te cruces conmigo.- Hablaba en susurros la joven, que por alguna razón se había molestado más de lo normal. Quizás el día estaba siendo agotador para ella.
-Aiko!.-Exclamó la más joven. Aiko casi se cae de espaldas al ver algo muy familiar para ella. Esa sudadera, sin ninguna duda era la de aquel chico. El joven estaba de espaldas mirando por la ventana. Aiko se acercó a el decidida y dio un par de golpes en su espalda. Sus compañeras miraban la escena sin poder decir nada por la impresión que les causo la reacción de Aiko.
-¿Sabes que se debe pedir disculpas cuando chocas con la gente?, ¿A caso no tienes modales?.- Dijo la chica, pero este ni siquiera se volvió para verla.- Oye! Encima no hagas como que no me escuchas!.- Se quejó, tomandole del hombro para que este se pusiese frente a ella.
-Aiko...Aiko será mejor que...-Intentaba decir YoungMi, cuando de repente no hizo falta palabras. Él joven se había dado la vuelta y miraba a Aiko con una enorme sonrisa mientras veía como esta casi cae de la impresión.
-Lo siento, tenía prisa antes.-Se disculpó el joven.
-Tu...tu...-Tartamudeaba.-¿Qué haces aquí?.-Le señalo con el dedo mientras daba unos pasos hacía atrás. En ese justo momento una mujer entró en la sala.
-Vaya, veo que ya se conocen. Gracias por venir Ji Yong.- Hizo una reverencia la mujer mientras tomaba asiento frente a las dos chicas que seguían sentadas sin poder pronunciar palabra por la reacción de su líder.
Re: {Hetero} Fall in love
Capítulo 2 Una despedida, un sueño.
-Él será nuestro productor!!.- Gritó Suni una vez fuera del edificio.
-Wa, tener a Ji yong oppa como productor es todo un honor.- Intervino YoungMi ahora con una tímida sonrisa.
-No lo es.- Bajo la cabeza Aiko resignada. Sus amigas se la quedaron mirando extrañadas.- Si es el productor...Yo no podré escribir canciones para el grupo!!.- Se quejo como una niña pequeña.
-Claro que si, solo tienen que llegar a un acuerdo.- La positiva Suni entró de nuevo en acción.- Por cierto.- Dijo sacando de nuevo los papeles de su mochila.- Tienes que dárselo a tus padres, los necesito mañana para que mi amigo falsifique la firma para el contrato con la YG.
-Todo esto es una locura, me volveré loca.- Exclamó Aiko tomando los papeles.
Con el corazón a mil entro en su casa, llegó justo a la hora de la cena, se había llevado todo el día fuera ultimando los detalles de su plan con las demás chicas. Solo tenía que decirle que se iría a Seul a un conservatorio, sería fácil. ¡Fighting!
Entro en la casa con los nervios a flor de piel, sentía su corazón latir de una manera descontrolada, tanto que temía que sus padres pudiesen oírlo.
-Ya estoy en casa!.- Grito desde la entrada, cerrando la puerta a su paso. Suspiró e intentó reunir el valor suficiente antes de ver a sus padres.
-La cena ya esta, ven rápido.- La avisaba su madre desde la sala, donde normalmente cenaban.
Aiko repaso mentalmente todo lo planeado con las chicas, se había aprendido de memoria todo lo que tenía que decir. Suni había sido la de la idea, esa pequeñaja tenía un cerebro propio de un estafador.
-Mamá...Papa..-Dijo mientras se sentaba en la mesa.- Tengo algo que deciros.- Tomó aire unos segundos, intentando calmar sus nervios.- Me han concedido una beca para estudiar en Seul.- Sus padres la miraron con extrañeza.- Es en un conservatorio, uno de los mejores.-Concluyó esta desviando su mirada al plato, realmente no podía soportar mentirles de esta manera a sus padres, sentía que en cualquier momento la descubrirían, por lo que inconscientemente cerro sus ojos esperando la sentencia.
-¿Enserio?, pero eso es genial!, serás una gran pianista, ya verás.-Dijo su madre emocionada.
-Mi hija una pianista, realmente estoy orgulloso de ti.-Continuó su padre.
-¿Por qué tan triste?.- Decía su madre dándole un abrazo.
-Seguro que estará preocupada, nunca había estado tan lejos de casa. Pero cariño seguro que lo haces genial. Estamos muy orgullosos de ti.- Su padre también se había unido al abrazo, Cada palabra hacia que Aiko sintiera un gran peso encima, en lugar de sentirse aliviada por el éxito que había tenido, el ver lo emocionados y orgullosos que estaban sus padres, hacía que ella se sintiese una horrible persona. Inevitablemente un nudo se hizo en su garganta, haciendo que le costase hablar, por lo que trago saliva y tras respirar profundamente intentó continuar con el plan.
-Solo...tenéis que firmar unos papeles.- Dijo cogiendo su mochila y sacando los documentos falsos. Sus padres lo leyeron con atención, Aiko los miraba nerviosa, de nuevo se veía al borde del precipicio.
-Oh, esta beca si que es completa.-Exclamó la madre.
-Nuestra hija realmente es buena tocando.-Siguió su padre, el cual fue el primero en firmar los papeles, su madre estaba más dudosa, le parecía demasiado bueno para ser verdad, pero tras ver la iniciativa de su marido, ella también firmó. Tras poseer los papeles firmados, Aiko pudo respirar tranquila.
-Bueno hija, ¿Y cuando vas a Seul?, ¿No tenemos que entrevistarnos con alguien?.- Preguntó su madre.
-Eh?.-Aiko casi se atraganta con la sopa, la pilló por sorpresa, esa parte no la habían ensayado.- Bueno...no hace falta, ellos están ocupados. Yo les mandé todos nuestros datos por e-mail.
-Mmm, de todos modos, ¿No tienes ningún número para localizarlos?, me quedaría más tranquila.-Insistió su madre. Aiko no sabía hasta que punto podría aguantar soltar tantas mentiras, jamás se le dio bien mentir.
-Vamos cariño, no te preocupes tanto, es tarde, mañana seguiremos hablando de esto.- Interrumpió su padre, levantándose de la mesa. Aiko sonrió internamente, aliviada por ver esa interrupción de su padre como una gran oportunidad de poder huir ilesa de la situación, le imito rápidamente y tras despedirse con un beso de sus padres se fue a su habitación.
Cuando por fin estuvo sola en su habitación, se desplomó sobre su cama. Suspiró profundamente, era agotador mentalmente. Ahora tendría que montar otro plan para que su madre no sospechara, realmente esto no era tan fácil.
Al día siguiente Aiko esperaba sentada en el banco de siempre a Suni y YoungMi. Con sus cascos puestos a todo volumen, como solía hacer cuando necesitaba desconectar, dejar de pensar, pues cuando oía la música todo a su alrededor dejaba de importar, se envolvía en aquellas melodías olvidándose de todo.
-Hey!.-La saludaba YougMi con un pequeño emparedado en la mano.- ¿Aún no ha venido Suni?.-Decía mientras se sentaba junto a su amiga, dándole un mordisco a aquel emparedado. Aiko negó con la cabeza mientras se quitaba los audífonos.
-Tiene que estar al venir.-Suspiró mientras se dejaba caer en el respaldo de aquel banco. YoungMi la miró con preocupación.
-¿Ocurre algo?.- Dejó de poner toda su atención en su emparedado preferido y se giro para poder mirar de frente a su amiga, la cual ahora tenía los ojos cerrados y una expresión bastante sombría en el rostro.
-Tengo ganas de abandonar YoungMi.-Confesó la chica. YoungMi abrió los ojos con sorpresa.
-Pero Aiko...-Intentó seguir la mayor, pero Aiko la interrumpió.
-Mis padres...¿Realmente merece la pena decepcionarlos?.-Aiko volvió a suspirar.- No quiero que me odien por esto.-Ahora sus ojos se habían vuelto húmedos, pero tras cerrarlos de nuevo y masajear sus sienes logró recuperar la postura. No quería que la vieran débil. Ella era ese tipo de persona que prefiere llorar cuando nadie la ve y poner su mejor sonrisa frente a las personas.
-No hay otra forma de que lo logremos. Aiko no podremos lograr esto sin ti. ¿No crees que te arrepentirás el resto de tu vida si no lo intentamos al menos?.- Las palabras de su amiga realmente habían echo efecto, Aiko suspiró de nuevo dándose por vencida y asintió con una media sonrisa. YoungMi sonrió y la abrazó euforicamente.- Todo va a salir bien, enserio.
-¿Y esas muestras de afecto?.-Sonreía Suni parándose frente a sus amigas. Las chicas sonrieron.
-Tenemos un problema.-Comenzó Aiko.- Mi madre quiere hablar con los que me concedieron la beca.- Suni río escandalosamente, dejando a sus amigas confundidas.
-¿Y eso es un problema?.- Suni tomó su móvil y tras hablar unas palabras, colgó.- Ya está. Tu madre recibirá esta misma tarde una llamada del conservatorio.- Volvió a sonreír satisfecha por su buen trabajo. Las chicas la miraron sorprendidas, ¿Cómo puede caber tantas ideas malévolas en una cuerpo tan pequeño?.
-¿Con que clase de personas te relacionas?, ¿Mafiosos, chantajistas...políticos?.-Dijo YoungMi realmente asombrada. Suni se limitó a sonreír, mientras Aiko prefería no saber, ella sería feliz si realmente lograba entrar a la YG con éxito y sin ser llevada a prisión por las amistades de su amiga Suni.
-¿Tienes los papeles?.-Se apresuró a preguntar la menor de las tres. Aiko asintió y rápidamente le dio los papeles.- Genial, entonces nos vemos en la empresa.- Sonrió de nuevo la joven.-Aiko no te preocupes, lo tengo todo bajo control.-Y tras sonreír de nuevo se marchó del lugar.
Habían quedado a las 5 de nuevo en la empresa para ultimar los detalles del contrato. La entrevista anterior había sido un éxito, las chicas tenían talento y solo con el vídeo que les mandó Suni ya tenían garantizada la entrada. Como Suni y Aiko eran menores les pedían las firmas de sus padres en aquel contrato.
-Son casi las 5, ¿Dónde se ha metido esta chica?.- Murmuraba Aiko mientras no paraba de andar de un lado a otro nerviosa, frente a la puerta del edificio de la empresa.
-Para de hacer eso, me estas poniendo de los nervios.-YoungMi la tomó por los hombros para que parase. Aiko sonrió divertida y se quedó quieta, mirando como desde la otra calle, venía Suni corriendo.
-Lo siento, ya estoy aquí.-Dijo mientras se inclinaba e intentaba recuperar el aliento.
-¿Los tienes?.-Preguntó Aiko realmente nerviosa, incluso más que antes. La menor sonrió, mientras sacaba los papeles de su bolso, tendiéndoselos.-Waau, realmente las firmas son idénticas.- Miró asombrada Aiko los papeles, YoungMi también se asomó a verlos.
-Vaya, tu amigo si que es bueno, ¿Dime, trabaja para la mafia o algo así?.- Bromeo la mayor. Suni sonrió.
-Vamos dentro.-Dijo la menor entrando primero al edificio. Sus dos amigas las siguieron anonadadas aun.
Nada más entrar les esperaba la mujer de la vez anterior. Con una brillante sonrisa, se las acercó a las chicas y las hizo subir a la oficina del segundo piso. Los nervios por parte de Aiko iban en aumento a la vez que subía los escalones.
-Bueno chicas, ¿Tenéis los contratos firmados?.-Preguntó la mujer una vez entraron en la pequeña oficina. Las chicas asintieron, primero fue YoungMi la que le tendió su contrato, pues ella no necesitaba la firma de sus padres, puesto que era mayor de edad. Luego Suni emocionada le dio el suyo, el cual si estaba firmado por sus padres. Y por último una nerviosa Aiko. La mujer los miró detenidamente. Los nervios de la líder iban en aumento.
-Esta bien.-Habló por fin aquella mujer.- Bienvenidas entonces a la YG family.- Sonrió. Las chicas saltaron de alegría, y por fin Aiko pudo respirar tranquila. -Ahora solo queda que viajen a Seul y se incorporen lo antes posible. Dentro de tres días sale vuestro vuelo, en el aeropuerto de Seul las estará esperando vuestra manager.
3 días después la chicas llegaron al aeropuerto de Busan. Los nervios estaban a flor de piel. Los padres de Aiko la habían acompañado, mientras Suni venía acompañada de una de sus criadas, o su nana como ella solía llamarla. Esa mujer se había ocupado de ella como si fuese su verdadera madre, puesto que por el trabajo de los padres de Suni, ellos casi nunca podían verla, por lo que Suni se había criado entre mucamas, chofers, mayordomos y demás personas que formaban el servicio de la mansión en la que vivía Suni, pero por el contrarío ella gozaba de una vida privilegiada, reemplazando el cariño de sus padres por vienes materiales...Realmente era algo triste, pero a ella eso parecía no importarle, por lo que sus amigas no le daban más importancia de lo normal. Por otro lado YoungMi no esperaba a nadie que fuese a despedirla. La conocía desde hacia unos años, exactamente 3, pero no sabía mucho de ella. Era como si fuera de la academia no tuviese vida. Nunca hablaba de su familia, solo conocían de ella a su novio, un chico bastante guapo, aunque algo arrogante, pero este parecía que no iba a venir.
-Cariño esfuérzate mucho. Estamos muy orgullosos de ti.-Le decía su padre a Aiko. La joven sonrió aguantando las lágrimas. Esta despedida se le hacía más dura de lo que ella había pensado, ya era difícil para ella el echo de irse sabiendo que les mentía, y tras oír las palabras de sus padres y el orgullo con el que hablaban, hacia que esta quisiera confesarles todo. Pero no podía, por lo que apretaba con fuerza sus puños e intentaba sonreír a toda costa.
-Llamanos al menos una vez al día, come bien y no te duermas muy tarde.-Le decía ahora su madre, mientras derramaba unas lágrimas por dejar a su hija marchar. La abrazó fuertemente, para luego darle una estampida de besos, Aiko se retiró forzosamente de su madre.
-Mamá por favor.-Dijo avergonzada esta.
-Mi niña ya es toda una mujercita.-Suspiró la madre, agarrándola de nuevo. Aiko suspiró de nuevo dándose por vencida.
Mientras YoungMi miraba la escena desde la cola para subir al avión. De vez en cuando miraba hacia la puerta del aeropuerto, esperando que SeoJin apareciese. Pero él no vendría, ella era consciente de aquello. Sabía que nunca debío mezclarse con el, que le haría daño, una persona tan egocéntrica como el no es capaz de amar a nadie más que no sea así mismo. Pero el amor es así, y ella estaba locamente enamorada de él. La decisión más dolorosa que había tomado había sido dejarle para cumplir su sueño, por eso no quería que Aiko dejase su sueño a un lado, pues aunque ella no lo dijese, estaba siendo igual de duro para YoungMi que para Aiko el echo de marcharse.
Unos pasos delante de Aiko, Suni se despedía de su nana.
-¿Ellos no vendrán verdad?.-Preguntaba Suni. La mujer negó con la cabeza, mientras le dedicaba una tierna sonrisa a la chica.
-Ya sabes lo ocupados que está.- Suni bufó.- Te llamarán cuando tengan un tiempo libre.- Suni suspiró.
-Como siempre.-Dijo con resignación.
- Por favor cuidate mucho.- La mujer, de edad avanzada, abrazó a la chica, sin poder evitar que unas lágrimas salieran de sus ojos.
-Estaré bien, tu también cuida de tu salud.- Suni besó la mejilla de la mujer y fue a reunirse con YoungMi.
Aiko al ver que sus dos amigas la esperaban en la cola también fue a su encuentro. Mientras se daba la vuelta para poder reunirse con las dos chicas, no pudo evitar soltar una lágrima que luchaba por salir, pero rápidamente bajo su rostro, y con la manga de su jersey se limpió todo rastro que quedase de aquel líquido salado. Levantó su rostro de nuevo y tras poner una de sus mejores sonrisas, se acercó a sus amigas. Ahora una nueva vida las esperaba en Seul.
Re: {Hetero} Fall in love
oOla apenas etoi con esto de las fan fic pero hasta ahora las q eh leido junto con la tuya me precen mui buenas .bye sigue escribiendo q ya es la 4 fan fic con la q me dejan clavada
:D
:D
Re: {Hetero} Fall in love
owo.. ame los capos.. quiero conti.. estan geniales
Giss ♣- ❀ Moderador
-
Nombre : Giselle
Inscripción : 19/07/2011
Mensajes : 1822
Edad : 27
☆ Couple : TaeRi
Reputación : 19
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Lun Mar 31, 2014 5:44 am por .:beezep:.
» {FanFic | Yuri - Hetero| .ChaeRa} Missing You.
Sáb Ene 25, 2014 10:51 pm por » ewe.
» {One Shot/Hetero/G-Dragon}...Mi estrella...
Sáb Ene 25, 2014 4:59 pm por Giss ♣
» {G-Dragon} Inscripciones
Sáb Ene 25, 2014 3:06 pm por Giss ♣
» {G-Dragon} Reglas de Sección.
Sáb Ene 25, 2014 1:51 am por Idilio.-
» {G-Dragon} Miembros.-
Sáb Ene 25, 2014 1:34 am por Idilio.-
» [Importante] Sitios Web Oficiales de 2NE1
Dom Ene 12, 2014 6:02 pm por Daymin-chan
» [Biografía] 2NE1
Dom Ene 12, 2014 5:29 pm por Daymin-chan
» [Información] Bom&Hi (Park Bom y Lee Hi)
Dom Ene 12, 2014 6:24 am por .:beezep:.